En una escuela técnica del este de la ciudad de Córdoba suele haber trifulcas cada octubre. Cuando se abren las preinscripciones para la matrícula del año siguiente, la gente pugna por conseguir un banco para que su hijo curse el secundario con orientación en Metalmecánica o en Electrónica. Es un clásico de barrio, que se asoma entre uno de los anillos de la Circunvalación. Son hijos de desocupados o subempleados, cuyos padres descubrieron que la escuela les enseña lo que ellos no pueden darles: la posibilidad de aprender a trabajar.
El Ipet aquel –como tantos otros– se convirtió en un emblema gracias a sus egresados, que suelen ser la mejor propaganda cuando, en algunos casos, consiguieron empleo aun antes de la colación de grados.
Esa es, quizá, la explicación al éxito que vienen teniendo en los últimos años los colegios técnicos. La matrícula general, en Córdoba, se dispara cada año gracias a los anotados en instituciones que renacieron después de años de abandono. Sólo en la provincia hay 91.950 estudiantes en escuelas técnicas públicas y privadas, casi un tercio de la matrícula total del secundario. Este año, de los 10.513 alumnos más que sumó todo el nivel medio –en relación a 2010–, 3.510 se anotaron en las 204 escuelas técnicas de gestión pública (sin contar los que ingresaron a los 48 colegios privados de esta modalidad).
El Ipet aquel –como tantos otros– se convirtió en un emblema gracias a sus egresados, que suelen ser la mejor propaganda cuando, en algunos casos, consiguieron empleo aun antes de la colación de grados.
Esa es, quizá, la explicación al éxito que vienen teniendo en los últimos años los colegios técnicos. La matrícula general, en Córdoba, se dispara cada año gracias a los anotados en instituciones que renacieron después de años de abandono. Sólo en la provincia hay 91.950 estudiantes en escuelas técnicas públicas y privadas, casi un tercio de la matrícula total del secundario. Este año, de los 10.513 alumnos más que sumó todo el nivel medio –en relación a 2010–, 3.510 se anotaron en las 204 escuelas técnicas de gestión pública (sin contar los que ingresaron a los 48 colegios privados de esta modalidad).
Y, si bien es cierto que no todas corren con la misma ventaja en infraestructura, trayectoria y gestión directiva, las técnicas no son hoy lo que eran hasta hace poco. Hay equipamiento a estrenar, recursos, netbooks y planes de siete años con títulos con validez nacional.
En Buenos Aires, alrededor de uno de cada siete alumnos de educación técnica cursa la especialidad agropecuaria. En Córdoba lo hace uno de cada cuatro (1.059 de 4.046), lo que convierte a nuestra provincia en la de mayor participación relativa de jóvenes en esta orientación (en el último año de la escuela).
De todas maneras, en valores absolutos, la especialidad que más se sigue en Córdoba –aunque en proporciones similares a la del resto del país–, es la mecánica: son 1.401 jóvenes los jóvenes que estudian en este rubro, apuntalando la tradición industrial de la provincia.
Pero el dato que más llama la atención en Córdoba es la falta de oferta y demanda relacionada con la especialidad en Informática, uno de los rubros más buscados en los últimos años, y de más crecimiento. No está claro si es por la inexistencia de instituciones, o porque la especialidad es relativamente nueva y el censo sólo abarca a estudiantes del último año.
La especialidad que le sigue al agro y a mecánica es química, con 776 estudiantes, y construcción, con 381.